No hay duda de que a todas las unidades del CEC les ha tocado afrontar retos importantes para adaptarse a las nuevas condiciones de pandemia a fin de continuar con el servicio, sin embargo, hay una en particular que ha tenido que sacar más de un as de la manga para poder dar respuesta casi inmediata a las necesidades urgentes que exigía el momento: se trata de la Unidad de Gestión Tecnológica (UGT). Si bien las plataformas fueron diseñadas para funcionar de forma local como remota, se requirió una serie de configuraciones para posibilitar el uso de los servicios desde fuera de las instalaciones. Se realizaron cambios en los módulos académicos, financieros, analítica de datos, así como en la mesa de servicios, telefonía IP y demás aplicativos e infraestructura del Centro, para que todo el personal pudiera teletrabajar desde sus hogares. La UGT también se encargó de contratar, implementar y capacitar al personal en una plataforma de videoconferencia que permitió ofrecer los cursos desde cualquier ubicación (modalidad remota), y desarrolló las funcionalidades necesarias para el agendamiento y toma de pruebas de ubicación de idiomas. Por si fuera poco, gestionó la entrega de equipos al personal administrativo para el trabajo remoto, la configuraron equipos en la red para el acceso a través de VPN a los repositorios de información y elaboró instructivos para orientar a los usuarios. Uno de sus principales retos fue la asistencia remota a los estudiantes, instructores y personal administrativo, para lo cual se tuvo que utilizar una serie de herramientas tecnológicas para el acceso remoto a los equipos de tal forma que el soporte sea personalizado y efectivo, contabilizando la impresionante cifra de 9.900 tickets atendidos solo en 2020.
A pesar de las restricciones de movilidad, los planes de mantenimiento de servidores y equipos de red no se interrumpieron, por lo que el personal de la UGT continuó asistiendo al CEC para mantener en correcto funcionamiento todos los sistemas y resolver problemas de incidentes relacionados con el hardware (dispositivos físicos). Cuando se definió el desalojo de las sedes Araucaria y Henry Guy, la UGT se encargó de desinstalar toda la infraestructura tecnológica de las sedes y de reconfigurar el esquema de la red existente. Por si fuera poco, continuó ejecutando los proyectos que estaban en marcha, adecuando cinco laboratorios de computación para la Facultad de Ciencias Administrativas (FCA) e implementaron el cableado estructurado de un laboratorio del Proyecto INEDITA. Del mismo modo, han venido trabajando en el proyecto para implementar la educación híbrida y en la revisión del diseño electrónico para los laboratorios de uso compartido que tendrá en CEC en la Facultad de Ingeniería en Sistemas (FIS), así como los diseños que requieren las nuevas sedes de El Bosque, Cucasa y del nuevo edificio del CEC.
Por todo lo anteriormente expuesto, la UGT se ha convertido en uno de los puntales principales para la continuidad de las actividades del CEC. El trabajo en equipo y el espíritu de colaboración de su personal ha permitido sobrellevar las extensas jornadas de trabajo, atender los nuevos requerimientos y proyectos de manera exitosa, por lo que les extendemos nuestro reconocimiento. Un gran agradecimiento a los compañeros tecnológicos, ¡Felicitaciones!